El campo de análisis está constituido por casi 800 centros, de los cuales un 25% se encuentra entre USA y Canada, un 23% en Europa, un 21% entre Asia y Pacífico, un 15% Latam y un 16% en el resto del mundo.

Como hemos venido haciendo en pasadas ediciones, iremos comentando, en diferentes entradas, algunos de los temas que se recogen en el documento original.

Como primer objeto de análisis tenemos la evolución del nivel medio de PUE, que este año alcanza el valor 1,57, continuando claramente con la tendencia de los últimos años.

El informe vuelve a reseñar cómo la mejora sustancial de PUE se produjo durante la primera parte de los años 10 y cómo, posteriormente, la curva de bajada se ha estancado en valores ligeramente por debajo de 1,6.

Todo ello obedece a la puesta en marcha de las buenas prácticas en la parte de clima, con la gestión de los flujos de aire frío y caliente, pero hasta donde estas medidas suponían un coste y un esfuerzo razonables. A partir del momento donde las acciones de mejora se complicaban, bien en lo que a inversión económica se refiere, o bien en cuanto a la dificultad técnica, el siguiente paso no se ha producido, al menos de una forma notoria.

Aun reconociendo que la media entre los nuevos diseños se pueda encontrar por debajo de 1,3, la existencia de un importante parque de data centers más antiguos, donde las principales mejoras inmediatas ya se han alcanzado, hace que la media general se haya estancado de una manera muy evidente.

Es importante reseñar que los valores presentados son valores medios entre unidades de data center y no entre unidades de trabajo TI, para el cual, previsiblemente, los niveles mejorarían bastante.

Como en otras ocasiones, el informe identifica el lado TI como el foco en el que se debe poner el énfasis para poder evolucionar en el tema de la eficiencia.