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PQC

Ingeniería de mantenimiento. Un concepto de relevancia para el éxito del negocio.

POSTED BY Garcerán Rojas 31 de July de 2018

Los Centros de Proceso de Datos se han erigido, durante los últimos años, en el corazón del negocio para la inmensa mayoría de empresas y organizaciones.

De la continuidad del servicio que allí se presta, depende directamente el éxito. Por ello, todos los esfuerzos se concentran en intentar garantizar, por todas las vías imaginables, que no existan posibilidades de error en el conjunto del sistema.

El problema

A la hora de plantear una nueva instalación o de remodelar una existente, estamos acudiendo con mucha frecuencia a topologías ciertamente sofisticadas, con elevados niveles de redundancia, con el objeto de dotar a la instalación de todos los recursos necesarios para que cumpla con los mayores niveles de exigencia.

Sin embargo, incluso con esos niveles ya implantados, las cifras de fallos en los CPDs siguen siendo importantes a escala internacional (disponemos de bastantes ejemplos en los últimos meses). Y las causas, según datos generales que ha podido ratificar PQC, apuntan hacia el error humano como principal responsable de este problema. Por tanto, si el foco lo hemos tenido orientado hacia aspectos materiales de infraestructura, es necesario cambiarlo urgentemente (o al menos ampliar al campo) hacia aspectos más relacionados con la componente humana y formal de la vida en un CPD, es decir, hacia la ingeniería en la operación del sistema y su mantenimiento.

Cómo se manifiesta

A lo largo de nuestra actividad en el mundo de los CPDs y, en particular, cuando nos toca diagnosticar las causas de problemas que se manifiestan en ellos, es muy corriente observar situaciones en las que los componentes básicos del sistema no responden como se espera de ellos, no se llevan a cabo pruebas reales de funcionamiento de los sistemas alternativos, las regulaciones son inapropiadas, la información restringida o directamente inútil, los procedimientos incorrectos o inexistentes, las operaciones erráticas por falta de entrenamiento, la formación escasa, etc. Al final, la consecuencia es evidente.

Los recursos

La dotación presupuestaria para la operación de un CPD resulta clave a la hora de marcar los objetivos de disponibilidad de este y, en los tiempos que corren, se observa claramente una rebaja generalizada sobre todo en aquellas partidas donde la repercusión, ante los ojos de quienes tienen que aprobar los presupuestos, no es muy negativa, al menos de forma inmediata.

Las consecuencias, sin embargo, están siendo mucho más rápidas de lo que cabía suponer y la necesidad de refuerzo una evidencia.

Qué estamos haciendo

Para cubrir las carencias observadas, es imprescindible el desarrollo de un Plan cuyos objetivos, de capital importancia, son entre otros los siguientes

  • Garantizar que la disponibilidad del servicio se encuentra en los niveles esperados para la topología de diseño seleccionada
  • Elevar el MTBF de los componentes del sistema
  • Conseguir un MTTR adecuado a las necesidades de un entorno crítico
  • Dar continuidad a los criterios de diseño
  • Confirmar o modificar los niveles de referencia para el funcionamiento general del sistema, así como los límites para el funcionamiento redundante de sus componentes
  • Evitar, por la vía de la formación, y los ensayos y simulaciones, los errores humanos en la actuación sobre un sistema crítico
  • Implementar, en la medida de lo posible, las novedades tecnológicas aplicables a salas técnicas
  • Validar el perfil técnico del personal adscrito al servicio de mantenimiento
  • Elevar y mantener el nivel técnico del mantenimiento a aplicar en recintos de misión crítica

Cómo

La solución se plantea mediante el desarrollo de un trabajo específico que se lleva a cabo habitualmente en tres fases de ejecución.

La primera de ellas consistente en un análisis en profundidad, tanto de la instalación como de la realidad actual de su operación y mantenimiento, identificando los puntos débiles del sistema.

La segunda, mediante la elaboración de un Plan de mantenimiento adecuado para la instalación, que puede ser completamente nuevo o simplemente reconstruido a partir del existente con inclusión preferente de las actividades de preventivo, correctivo y los acuerdos de nivel de servicio.

La tercera, mediante la puesta en marcha y supervisión de las acciones incluidas en el Plan, así como con la incorporación de aspectos complementarios de mucha importancia como las operaciones en contingencia, la jerarquización de alarmas, la prescripción de ensayos y pruebas específicas, la eficiencia energética, la gestión y el flujo de información, la seguridad, la formación, etc.

Cuándo

La realización de un trabajo de ingeniería de mantenimiento, con el desarrollo de las fases descritas, es una tarea que puede efectuarse en cualquier momento, pero, cuanto antes, mejor.

Las estadísticas son frías e implacables y nadie queda libre de ellas. Por tanto, hay que tomar medidas, y apoyar con el día a día de una instalación la inversión, habitualmente muy elevada, que supuso en su momento la creación del Centro.

Cuánto

Los costes de operación de un CPD no son, que se diga, pequeños. El coste de la energía, el mantenimiento en conducción, los acuerdos de nivel de servicio con proveedores, etc., suponen unas cifras anuales que son importantes, aunque plenamente justificadas por la criticidad del servicio que se soporta. Por ello, hay que optimizar esa inversión, en la medida de lo posible.

En muchas ocasiones, al principio, cuesta lo mismo hacer las cosas bien o mal (al final siempre resulta más caro hacerlas mal) por lo que resulta francamente recomendable entrar a considerar la disciplina que más dolores de cabeza está dando. Y hacerlo con orden, buena compañía y consumada especialización. El reto es exigente pero la meta alcanzable y los resultados tremendamente satisfactorios ya que, además de las mejoras inmediatas la inversión realizada resulta casi siempre amortizada en plazos increíblemente cortos.

Garcerán Rojas