Una de cuyas viñetas más recordadas era la del procedimiento “manual” de transferencia entre red normal y sistema de emergencia, bautizado por Forges como “el obsoleto Fernández Style Junacontinuous".

El caso es que Fernández es el típico currante cuya única misión, que no es poco, consiste en mantener el servicio activo, para lo cual ha de concentrarse en el estado de la iluminación y, en caso de pérdida, proceder a la conexión de las baterías (ejemplo típico de sistema de respaldo).

Forges calificaba de obsoleto ese sistema, pero hete aquí que, con el libro ya terminado y antes de su presentación, tuvimos ocasión de comprobar cómo hay realidades que superan, incluso, la ficción. El Fernández Style Junacontinuous era, ciertamente, un procedimiento al uso.

Se trataba de una instalación, no exactamente de data center, pero sí podríamos calificarla como de entorno crítico. En ella, de vez en cuando, se producían arranques injustificados del grupo de emergencia con actuación del sistema automático de transferencia.

Tras muchas e infructuosas intentonas de resolver el problema (se llegó a cambiar el automatismo, el cuadro de salida de grupo, los interruptores principales, etc.), los responsables involucrados en el asunto (propiedad, ingeniería, proveedores de aparellaje y de los grupos, etc.) decidieron llamar a PQC para intentar dar, de una vez por todas, una explicación al problema y, con ella, una buena solución al mismo.

Mientras tanto, el sistema automático de transferencia, de última generación, quedó anulado a la espera de mejores tiempos y, para mantener una rápida respuesta del sistema ante pérdida de alimentación de red exterior, se ideó un original método, a la vieja usanza.

Así conocimos el auténtico Junacontinuous, el de carne y hueso, contratado por la propiedad para erigirse en baluarte de la continuidad de servicio.

Su puesto de trabajo, una silla frente a los UPSs, su horario, turnos de seis horas, su objeto de atención, la mirada fija en las luces asociadas al funcionamiento de las baterías, su herramienta de trabajo, un teléfono con un solo número registrado, su misión ante la pérdida de red, marcar el número acordado e indicar, alta y clara, la instrucción correspondiente, es decir: ¡ARRANQUEN INMEDIATAMENTE EL GRUPO!

La llegada de PQC tuvo un carácter agridulce, ya que, por un lado, el problema, de naturaleza asociada a los circuitos de tierra, quedó resuelto, pero, por el otro, Junacontinuous perdió su puesto de trabajo.

¡Gensanta!

(consultar palabros universales de Forges)

** Junar es una expresión que significa “Mirar” o, más bien, “Observar”. Al parecer, viene del lunfardo, por lo que también debería ser conocida en lugares como Argentina, Uruguay o el mismo Chile. Un “junacontinuous” es aquél que observa en todo momento