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PQC

Nuevas tecnologías de baterías

POSTED BY Garcerán Rojas 30 de noviembre de 2018

Las baterías de ion-litio reúnen una importante capacidad de energía con un ciclo de vida apreciablemente alto, pero tienen una peligrosa tendencia a estallar.

En los últimos tiempos han existido varios ejemplos de ello, entre los cuales quizá el más nombrado haya sido el de los teléfonos móviles, sobre todo los pertenecientes a una marca y modelo determinados.

Sin embargo, este tipo de sucesos no se limita a esa aplicación, sino que se extiende a otras, correspondiendo los análisis más recientemente publicados en USA al terreno de los cigarrillos electrónicos, donde entre 2009 y 2016 reportaron 195 casos de explosión (National Fire Data Center of the US Fire Administration) de los cuales 38 tuvieron como consecuencia lesiones consideradas como severas (quemaduras de tercer grado, lesiones faciales o pérdida de alguna parte del cuerpo).

Como bien puede deducirse, las repercusiones de esta situación están provocando, entre otras cosas: lesiones, reclamaciones de producto, prohibiciones de vuelo, etc.

Ante esa problemática, los investigadores han promocionado las baterías de litio de estado sólido como una alternativa más segura donde los dispositivos intercambian los electrolitos líquidos inflamables por un sólido inerte tal como plástico o cerámica.

Pero lo cierto es que esos investigadores llevan años persiguiendo este tipo de tecnologías sin que ello haya dado hasta ahora resultados. Sin embargo, parece que, por fin, existe una start-up planeando la introducción en el mercado de esta solución que es capaz de almacenar, para el mismo peso, el doble de energía que sus hermanas de ion-litio. Por ejemplo, en su aplicación a los drones más sofisticados que incorporan a bordo sensores, cámaras y procesadores, el tiempo de duración actual de sus baterías no suele sobrepasar los 20 minutos y con la nueva tecnología podrá, por tanto, ampliarse hasta los 40.

Las nuevas baterías en su aplicación a drones, están siendo ensayadas y la previsión es que se encuentren listas para su venta este este mismo año. Para 2019 se prevé la salida de los modelos aplicables a las prendas de vestir y, para 2021, las de aplicación a vehículos eléctricos.

Por último, citar que existen dos desventajas claras de estos nuevos modelos:

  • Por un lado, su precio que prácticamente dobla las precedentes (aunque se asegura que la producción a mayor escala reducirá de forma importante el coste actual).
  • Por el otro, la limitación en el número de recargas que se encuentra, de momento, en la quinta parte de las de ion-litio.

                                                                                                       Ref. IEEE and Michael Pecht articles.

Garcerán Rojas